Presa de Isbert se desborda

Las Provincias 11/10/2008
La presa de Isbert se desborda y desata la alarma en la Marina Alta
Las lluvias aumentan el caudal del Girona, que vuelve a inundar la carretera de Vall d'Ebo y obliga a cortar el tráfico
C. PASTOR/S. IVARS DÉNIA
La presa d'Isbert ya se salía ayer por la mañana cuando el cielo empezaba a despejarse en la Marina Alta, pero de las 13 horas, las lluvias volvieron a hacer acto de presencia y durante toda la tarde hicieron saltar las alarmas de los pueblos de la ribera del Girona y del Gorgos.
En la Vall d'Ebo, el jueves, se registraron incidentes en la carretera principal pues la crecida del Girona obligó a cortar el acceso por esta vía durante 11 horas. Circunstancia que se volvió a repetir anoche a las 21 horas, por lo que se alertó a los alcaldes de El Verger, Beniarbeig, por si acaso hubiese inundaciones.
El alcalde, Rafael Llodrá, explicó que el hecho de que el río anegue la carretera es algo "normal" ya que durante la lluvias de octubre de 2007 el cauce del Girona "disminuyó metro y medio debido a la acumulación de piedras en el fondo". Además, la carretera bordea el río y con precipitaciones "como las de estos días debe cerrarse al tráfico".Esta situación se podrá solucionar a partir del lunes, ya que Llodrá dijo que desde la Confederación Hidrográfica del Júcar "me han asegurado que se desplazará una pala para limpiar el lecho" fluvial y aunque "la carretera está solo 60 centímetros más alta que el río, el pueblo no corre peligro ya que hay 20 metros de diferencia" de altitud.
Sin embargo, el peligro era constante en prácticamente toda la comarca ya que en las zonas del interior, donde nacen los ríos, se sucedían lluvias débiles con trombas de hasta 10 litros por metro cuadrado en una hora. Nada comparado con los 50 litros recogidos el miércoles en dos horas, pero los caudales ya estaban llenos.
De continuar las lluvias torrenciales, desde Les Valls aseguraron que podrían "producirse desbordamientos similares" a los de la riada del año pasado. También, porque la presa de Isbert sigue inutilizada por culpa de las muchas filtraciones que registra.
A las cantidades recogidas entre la noche del jueves y ayer destacan los 230 litros por metro cuadrado en la Vall d'Ebo, los 200 en la Vall de Gallinera y los 310 litros acumulados en la Vall d'Alcalà.
El alcalde de la Vall de la Gallinera, Miquel Cortell, comentó que ayer se tuvo que cortar la carretera que une La Carroja y Al Patró un par de veces, aunque fue reabierta al tráfico después de que las brigadas "limpiaran el pavimento de piedras y grava".
Cortell también comentó que el río Gallinera, que después pasa por Gata llamándose Gorgos, bajaba con el "caudal lleno", pero "sin problemas para el municipio debido a la altura y la pendiente" a la que está situado.
Donde sí se podrían registrar incidentes es en las partes más bajas de la ribera, si continuaban las rachas intermitentes de fuertes lluvias en las zonas interiores.Por el contrario, ayer por la tarde desde los tres pueblos más afectados por la riada de octubre del año pasado (Beniarbeig, Els Poblets y El Verger), sus máximos responsables comentaron que el Girona bajaba a medio caudal y sin incidencias. Pero la gota fría ya dejó la noche del jueves desperfectos en varias localidades. En Dénia, el fuerte viento derribó vallas publicitarias, Ondara quedó a oscuras durante dos horas y las ráfagas de viento derribaron un semáforo en la avenida de Alicante. El tráfico marítimo en Dénia siguió ayer cerrado, y los buques con destino a Ibiza anularon sus travesías previstas.
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