Balsas de regulación en el Rio Girona

Información 11/01/2009
El Consell dice que el Tajo-Segura es "inexcusable" y no admitirá su final
García Antón exige la derogación de la disposición que fija una caducidad para el trasvase y acepta el agua desde Extremadura como "complemento"
TERUEL

La Generalitat mantiene que el trasvase Tajo-Segura es "inexcusable tal y como está" y que no admitirá su caducidad "bajo ningún concepto". Con estas palabras, el conseller de Medio Ambiente, Agua, Urbanismo y Vivienda, José Ramón García Antón, se mostró ayer firme en la defensa de estas aportaciones hídricas, y rechazó que se sugiera su final para el año 2015. En este sentido, calificó de "intolerable" que el futuro de la conducción dependa en exclusiva del gobierno de Castilla-La Mancha.

Por este motivo, exigió que la caducidad del Tajo-Segura desaparezca del Estatuto de esa comunidad, así como que se derogue la disposición transitoria de la reforma de la Ley del Plan Hidrológico Nacional (PHN) donde se recoge esa misma posibilidad. García Antón valoró que el Gobierno "intente suavizar posturas" en este tema, pero, a su juicio, lo hace "de forma débil", cuando los acuerdos de ese tipo requieren de "seriedad". Además, consideró que esto prueba que "los socialistas son ahora presos de sus errores".

Para el conseller, otro trasvase desde Extremadura no supliría al actual Tajo-Segura. Así, se mostró de acuerdo con que se lleve a cabo esa conducción, pero como un "complemento" a la existente desde los embalses de Entrepeñas y Buendía, y no como un proyecto "excluyente" al otro. Según García Antón, resulta "intolerable" que se haya planteado una conexión entre el curso medio del Tajo y la cuenca del Segura "por el Estatuto de Castilla-La Mancha". Del mismo modo, consideró "un gran error" que el presidente de esa comunidad, José María Barreda, haya "llegado tan lejos", con un texto autonómico "inconstitucional" que parece "un plan hidrológico del Tajo".

En contraposición, destacó que Extremadura "tiene clara la solidaridad entre autonomías", por su disposición a que se ejecute un trasvase del Tajo desde su territorio. El hecho de que dos comunidades gobernadas por el PSOE muestren posturas distintas sobre un mismo tema es "una de las muchas contradicciones" que, en su opinión, hay en este partido. Sin embargo, estimó que esa "falta de coordinación total" es al mismo tiempo "una esperanza", y lamentó que los socialistas de Alicante y del resto de la Comunidad "no actuaran de forma solidaria" cuando apoyaron el Estatuto castellano-manchego.

El Ebro y la reutilizaciónGarcía Antón también volvió a reivindicar la ejecución del trasvase del Ebro, alegando que la conducción a Barcelona realizada el año pasado de urgencia mostró que "es posible" llevar agua de ese río a otras zonas, y la Comunidad tiene "el mismo derecho" a recibirla. Sobre esta cuestión, aludió a que su cuenca abarca parte del norte de Castellón, y que, además, es "necesario" y compensaría de forma adecuada a la "eficiencia" en la gestión hídrica. La misma reivindicación demandó para el Júcar-Vinalopó, para el que exigió "agua de calidad".

El conseller expuso todos estos temas durante la presentación del Plan de Reutilización de Agua Depurada de la provincia de Alicante, que comprende un total de 25 actuaciones, por un valor de 238 millones de euros. En conjunto se prevé reaprovechar un volumen anual de 139 hectómetros cúbicos, que fundamentalmente irán destinadas a riego, aunque también se contemplan otros usos como el industrial o para instalaciones turísticas.

Entre las obras más destacadas, citó la "vanguardista y sofisticada" depuradora de Alicante Sur, cuyo inicio está previsto para las próximas semanas. El plan fue detallado por el director general del Agua, José María Benlliure, quien incidió en aspectos como el "anillo" de conducciones con el que se pretende conectar La Vila Joiosa y el paraje del Hondo de Elche. En esta zona se contemplan tres nuevas depuradoras, en Sant Joan d'Alacant y El Campello, aparte de la citada de Alicante Sur.

En el resto de la provincia, destacan las cuatro nuevas balsas de regulación previstas en la Marina Alta, para aprovechar las avenidas del río Girona. Esta presentación fue seguida por diversos alcaldes y representantes de agricultores y regantes, entre ellos el presidente de Asaja-Alicante, Eladio Aniorte, quien demandó que "no se toquen los derechos consolidados del Tajo-Segura".
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